gala
Atias
DECISIÓN MATERIAL
Sin intencionalidad no hay materialidad…solo hay materia. La decisión material tiene un enorme poder potencial en la instancia de ideación inicial, siendo vital en el proceso de su formalización: Cuando pensamos un proyecto debemos pensar necesariamente una materialidad determinada. Como decía Oddone “el arquitecto piensa, pero no producirá una obra hecha con palabras, sino un objeto hecho de formas y materiales”.
La materialidad aparece desde el principio mismo de las ideas, al menos como un germen que luego se desarrolla. Esta requiere un empeño creativo equivalente al de las otras variables del proyecto (como la interpretación de un programa de necesidades o la inserción en un sitio determinado). La materialidad plantea un orden intrínseco de los factores de la obra, otorgando coherencia al proyecto.
Cuando pensamos en un material debemos hacerlo a partir de 2 dimensiones simultáneas: Una subjetiva ligada a sus cualidades sensibles (color, textura, peso, etc) y otra objetiva vinculada a sus propiedades físicas (capacidad estructural y posibilidad constructiva).
La elección de un material y su forma de utilización van a hablar de nuestra relación con el mundo que nos rodea: De nuestra visión de lo que es esencial o innecesario, de lo que es profundo o superficial, de lo establecido y lo innovador, de la economía y el derroche, del consumo y de la moda. Los materiales y las técnicas tienen ellos mismos connotaciones sociales e ideológicas que nacen de los costos, de las dificultades técnicas, del uso y de las valoraciones.